Acción (Finanzas) - ¿Que son las acciones en una empresa?
Las acciones son los títulos que confieren el derecho de propiedad sobre una compañía, por ende, representan cada una de las fracciones en que se fragmenta el capital de una entidad comercial. Una empresa tiene la facultad de desmembrarse en la cantidad de participaciones que considere apropiada, sin embargo, su transacción está regulada por las autoridades estatales y los intermediarios bursátiles.
Indice de Contenido
Introducción
Las acciones pueden ser nominativas (en las cuales se especifica el nombre del propietario) o al portador. Su transacción es libre y puede realizarse en los mercados bursátiles siempre y cuando se cumplan ciertos requisitos. En España, por ejemplo, estos requisitos implican que en los dos años previos a su inclusión en la bolsa (tres si no son consecutivos), la empresa debe haber distribuido dividendos equivalentes al menos al 6% de su capital entre sus accionistas. Asimismo, debe proporcionar un informe trimestral sobre su situación financiera y los cambios que afecten su cuenta de explotación, y contar con un número mínimo de títulos negociables. En los países latinoamericanos, las condiciones son similares.
Otra forma de clasificar las participaciones es por su tipo, pudiendo ser ordinarias o preferentes. Las participaciones preferentes brindan ciertos privilegios a sus poseedores que no se otorgan a los tenedores de participaciones ordinarias, como el derecho a recibir dividendos predeterminados sobre las ganancias de la compañía. En cambio, las participaciones ordinarias solo recibirán dividendos cuando la junta de la empresa lo estime oportuno.
Existe otro significado que puede ser atribuido a las acciones, el cual está estrechamente vinculado con su función como división equitativa del capital social en una sociedad anónima. Cada una de estas divisiones se encuentra bajo la propiedad exclusiva de un individuo conocido como accionista, quien a su vez ostenta la titularidad de una parte de la empresa, lo que se traduce en un porcentaje de participación y dominio sobre la misma.
Poseer acciones ya sean ordinarias o preferentes, implica tener un derecho preferente de suscripción de nuevas participaciones en caso de que se produzca una ampliación del capital. Al ejercer este derecho, la participación anterior se conoce como "ex derecho". Además, las participaciones confieren el derecho a voto en proporción a la cantidad de ellas que se posean, lo que requiere que el accionista cumpla con un mínimo establecido en los estatutos de la sociedad para poder ejercer su derecho a voto.
Los conceptos de capitalización y sociedad surgieron durante el Renacimiento, cuando las empresas comenzaron a crecer y un individuo no podía reunir todo el capital requerido para emprender grandes proyectos. Una de las principales ventajas de las participaciones es que permiten acceder al ahorro de otros agentes económicos. Además, los accionistas no son responsables de las pérdidas de la sociedad con sus propios bienes, por lo que su responsabilidad se limita a la cantidad que hayan invertido en la compra de las participaciones, lo que representa otra importante ventaja.
Tipos de acciones
Acciones Comunes u ordinarias:
Las participaciones conceden al titular una parte proporcional del patrimonio empresarial y, como resultado, le otorgan el derecho a participar en las juntas corporativas de la empresa con su voz y voto.
Acciones preferentes:
Las acciones que ofrecen una tasa de dividendos generalmente estable, conocidas como acciones preferentes, tienen la particularidad de que cuentan con una prioridad en el pago de los dividendos respecto a las acciones comunes. Esto se debe a diversas razones financieras, como la necesidad de ofrecer mayores incentivos para los inversores que asumen mayores riesgos en la empresa.
Acciones de voto limitado:
Las acciones que confieren el derecho a voto solamente en ciertas cuestiones empresariales, también conocidas como acciones con derecho limitado a voto, suelen tener ciertas ventajas en comparación con las acciones comunes. Por ejemplo, pueden ser preferentes en cuanto al pago de dividendos o generar un dividendo superior. A cambio de este derecho limitado a voto, los inversores pueden beneficiarse de una mayor rentabilidad en su inversión y una mayor protección frente a eventuales riesgos empresariales.
Acciones Convertibles:
Existen ciertas acciones que tienen la particularidad de poder convertirse en bonos, aunque generalmente suele ocurrir lo contrario, es decir, que los bonos puedan convertirse en acciones. En este caso, los inversores pueden obtener ciertos beneficios en términos de flexibilidad y versatilidad, ya que les permite ajustar sus carteras de inversión de acuerdo a las condiciones del mercado y a sus necesidades particulares. Además, esta característica puede ser especialmente útil en momentos de incertidumbre o volatilidad, ya que ofrece una mayor protección frente a potenciales riesgos financieros.
Acciones de industria:
En vez de hacer una contribución monetaria directa al capital de la empresa, los titulares de acciones reciben un número determinado de estas a cambio de aportar un servicio o trabajo específico a la entidad. Es decir, en lugar de invertir dinero en la empresa, los accionistas contribuyen con su trabajo o habilidades, lo que les otorga el derecho a ser parte del accionariado. Este método de remuneración se conoce como "compensación en acciones" y es una forma común de motivar e involucrar a los empleados en el crecimiento de la compañía.
Acciones Liberadas:
Se trata de acciones que son emitidas por la empresa como forma de pago de dividendos o beneficios que el tenedor debería haber recibido, pero que por alguna razón no pudo cobrar en efectivo. En este caso, la empresa emite estas acciones en lugar de efectuar el pago correspondiente en efectivo, y el tenedor las recibe sin necesidad de realizar ningún desembolso adicional. A estas acciones se les conoce como "acciones liberadas" o "acciones liberadas de pago". Es importante destacar que, aunque el tenedor no tenga que pagar por ellas, estas acciones tienen un valor determinado y pueden ser objeto de compraventa en los mercados de valores.
Acciones propias:
son aquellas acciones que una empresa posee de sí misma, es decir, que la empresa ha comprado sus propias acciones en el mercado. Este tipo de acciones son utilizadas por las empresas por diversas razones, como, por ejemplo, para reducir el número de acciones en circulación, para aumentar el valor de las acciones restantes, o para utilizarlas como forma de pago en futuras adquisiciones. Las acciones propias no confieren derecho de voto ni derecho a dividendos a la empresa, ya que la empresa no puede votar en sus propias juntas ni pagar dividendos a sí misma.
Acciones con valor nominal:
son aquellas que tienen un valor establecido en los estatutos de la empresa y que no cambia con el tiempo. Este valor nominal se refiere al valor contable de la acción y se utiliza principalmente para determinar la cantidad de capital social que una empresa tiene en circulación. A menudo, el valor nominal de las acciones es inferior al valor de mercado de la acción en sí, lo que significa que una acción con un valor nominal de 1 euro puede venderse en el mercado por un precio mucho mayor. El valor nominal se utiliza también para establecer el valor de las acciones en caso de liquidación de la empresa o en la distribución de dividendos.
Acciones sin valor nominal:
Las acciones sin valor nominal, también conocidas como acciones al portador, son aquellas que no tienen un valor nominal asignado. Esto significa que el valor de la acción se determina por el precio que se fija en el mercado al momento de su compra o venta. A diferencia de las acciones con valor nominal, que tienen un valor fijo, las acciones sin valor nominal no tienen un precio predeterminado y su valor puede fluctuar en función de la oferta y la demanda del mercado. Las acciones al portador suelen ser utilizadas por empresas que buscan flexibilidad en la emisión y comercialización de sus acciones. Sin embargo, en algunos países su uso está restringido o prohibido debido a que dificultan la identificación de los propietarios de las acciones y pueden facilitar actividades ilícitas como el lavado de dinero.
