Plutón (planeta enano)
Descubierto por Clyde Tombaugh el 18 de febrero de 1930, Plutón es un planeta enano del sistema solar que se encuentra más allá de la órbita de Neptuno. Su nombre proviene del dios mitológico romano Plutón, conocido como Hades en la mitología griega. En la Asamblea General de la Unión Astronómica Internacional (UAI) celebrada en Praga el 24 de agosto de 2006, se estableció una nueva clasificación llamada planeta enano, que incluye a Plutón.
Posteriormente, en 2008, la UAI designó una categoría adicional para los planetas enanos similares a Plutón, llamada plutoide, que abarca aquellos en órbita más allá de Neptuno. Plutón es el prototipo de los plutinos, una categoría de objetos transneptunianos. Su órbita es altamente inclinada y excéntrica con respecto a la eclíptica, llegando a acercarse en su perihelio más allá de la órbita de Neptuno. Además, cuenta con cinco satélites: Caronte, Nix, Hidra, Cerbero y Estigia, todos ellos cuerpos celestes que comparten la misma clasificación.
Indice de Contenido
Introducción
Debido a su gran distancia del Sol y de la Tierra, así como a su pequeño tamaño, Plutón no brilla por encima de la magnitud 13,8 en sus momentos más favorables, como el perihelio orbital y la oposición. Por lo tanto, solo puede ser observado utilizando telescopios con una apertura de al menos 200 mm, a través de fotografías o con cámaras CCD.
Incluso en sus mejores momentos, aparece como un punto de luz estelar, de color amarillento, sin características distintivas (con un diámetro aparente inferior a 0,1 segundos de arco). No fue hasta el año 2015, cuando la sonda espacial New Horizons pasó cerca del planeta, que se pudo apreciar claramente su apariencia real por primera vez.
El astrónomo estadounidense Clyde William Tombaugh (1906-1997) descubrió Plutón el 18 de febrero de 1930 desde el Observatorio Lowell en Flagstaff, Arizona. Durante mucho tiempo, Plutón fue considerado el noveno planeta más pequeño del sistema solar tanto por la Unión Astronómica Internacional como por la opinión pública, hasta el año 2006. No obstante, su clasificación como planeta siempre fue objeto de controversia entre los astrónomos. Durante años se creyó que Plutón era un satélite de Neptuno que había escapado de su atracción al alcanzar una segunda velocidad cósmica, pero esta teoría fue descartada en la década de 1970.
Después de un intenso debate y gracias a la propuesta de los astrónomos uruguayos Julio Ángel Fernández y Gonzalo Tancredi, Plutón fue reclasificado como planeta enano en una reunión de la Asamblea General de la Unión Astronómica Internacional en Praga, República Checa. Esta reclasificación se basó en el requisito de que un planeta debe tener dominancia orbital. Aunque inicialmente se propuso su clasificación como planeta en el borrador de resolución, esta mención fue eliminada en la resolución final que fue aprobada por la Asamblea General de la UAI. A partir del 7 de septiembre de 2006, Plutón recibió el número 134340, asignado por el Centro de Planetas Menores.
En la década de 1840, Urbain Le Verrier utilizó la mecánica newtoniana para predecir la posición de Neptuno después de analizar las perturbaciones en la órbita de Urano. Observaciones posteriores de Neptuno a finales del siglo XIX llevaron a los astrónomos a especular que otro planeta, además de Neptuno, estaba afectando la órbita de Urano.
En 1906, Percival Lowell, un adinerado residente de Boston que había fundado el Observatorio Lowell en Flagstaff, Arizona, inició un extenso programa de búsqueda del noveno planeta, al que llamó Planeta X. Para 1909, él y William H. Pickering habían sugerido varias coordenadas celestiales donde podría encontrarse este planeta. Lowell y los miembros de su observatorio llevaron a cabo la búsqueda, pero no obtuvieron resultados hasta la muerte de Lowell en 1916.
Sin embargo, sin saberlo, Lowell había fotografiado al planeta en placas tomadas el 19 de marzo y 7 de abril de 1915, donde aparecía como un objeto débil. También existen otras catorce observaciones previas conocidas, siendo la más antigua realizada en el Observatorio Yerkes el 20 de agosto de 1909.
Sin embargo, la búsqueda del Planeta X se detuvo debido a una disputa legal que duró diez años con la viuda de Percival, Constance Lowell. Ella deseaba recibir una parte del legado que su esposo había dejado al observatorio. En 1929, Vesto Melvin Slipher, el nuevo director del observatorio, encomendó la tarea de búsqueda a Clyde William Tombaugh, un joven de 23 años de Kansas que lo impresionó con sus habilidades en el dibujo astronómico.
La labor de Tombaugh consistía en tomar pares de fotografías del cielo nocturno y luego examinar cada par para determinar si algún objeto había cambiado de posición. Para esto, utilizó un microscopio de parpadeo, un dispositivo que creaba una ilusión de movimiento al desplazar rápidamente dos fotografías entre sí, lo que le permitía detectar cambios en la posición de los objetos o en la apariencia de las imágenes.
Después de casi un año de búsqueda, el 18 de febrero de 1930, Tombaugh encontró un objeto que había cambiado de posición en las placas tomadas el 23 y 29 de enero de ese mismo año. Una fotografía de menor calidad tomada el 21 de enero ayudó a confirmar el movimiento. Después de obtener fotografías adicionales para confirmación, la noticia del descubrimiento se telegrafió al observatorio del Harvard College el 13 de marzo de 1930.
El descubrimiento de Plutón se convirtió en una noticia de alcance mundial. El observatorio Lowell, que tenía el derecho de nombrar al nuevo objeto, recibió más de 1000 sugerencias, que iban desde "Atlas" hasta "Zymal". Clyde Tombaugh instó a Vesto Melvin Slipher, el director del observatorio, a proponer un nombre antes de que alguien más lo hiciera.
Constance Lowell, la viuda de Percival Lowell, sugirió inicialmente los nombres de "Zeus" y "Percival", y finalmente propuso el nombre "Constance". Sin embargo, ninguna de estas opciones fue considerada.
El nombre "Plutón", en referencia al dios romano del inframundo, fue propuesto por Venetia Burney, una estudiante de Oxford con interés en la mitología clásica. Durante una conversación con su abuelo Falconer Madan, quien era miembro de la Biblioteca Bodleiana, surgió la propuesta. Luego, Herbert Hall Turner, un astrónomo, transmitió el nombre a sus colegas estadounidenses a través de un cable.
Cambio de categoría
A partir de 1992, se han descubierto numerosos cuerpos en la región del sistema solar cercana a Plutón, lo que ha revelado que forma parte de la población de objetos del cinturón de Kuiper. Esto generó controversia sobre si Plutón debía considerarse como un planeta o como parte de esa población. Algunos directores de museos y planetarios contribuyeron a esta controversia al omitir a Plutón de los modelos del sistema solar en sus instituciones. Por ejemplo, el planetario Hayden volvió a abrir sus puertas en 2000 después de una renovación, pero con un modelo que incluía solo ocho planetas. Esto generó titulares en algunos periódicos casi un año después.
Debido al descubrimiento de objetos cada vez más cercanos en tamaño a Plutón, se argumentó que debería ser reclasificado como uno de los objetos del cinturón de Kuiper, siguiendo el ejemplo de Ceres, Palas, Juno y Vesta, que perdieron la categoría de planeta después del descubrimiento de numerosos asteroides. En 1999, el astrónomo Brian Marsden, en ese momento director del Centro de Planetas Menores, propuso incluir a Plutón en el catálogo de cuerpos menores asignándole el número (10000). Sin embargo, esta idea no fue aceptada por la Unión Astronómica Internacional y el asteroide 1951 SY recibió ese número y posteriormente se le dio el nombre de Miriosto.
La controversia se intensificó a partir de 2001 con el descubrimiento frecuente de objetos similares a Plutón en el sistema solar exterior. En 2002 se descubrió Quaoar, un objeto transneptuniano con un diámetro aproximado de la mitad de Plutón. En 2003, a una distancia de 100 UA, se encontró Sedna, con un diámetro de aproximadamente 1000 km.
El 29 de junio de 2005, astrónomos del Caltech anunciaron el descubrimiento de un nuevo objeto transneptuniano llamado Eris, que resultó ser más masivo que Plutón y el objeto más masivo descubierto en el sistema solar desde Tritón en 1846. Tanto los descubridores como la prensa lo llamaron el décimo planeta, pero no hubo consenso inicial en la comunidad astronómica sobre si debía ser considerado un planeta. Otros astrónomos consideraron que este descubrimiento brindaba el argumento más sólido para reclasificar a Plutón como un planeta menor.
Características físicas
La Unión Astronómica Internacional (IAU), a través de su Grupo de Trabajo para la definición de Coordenadas Cartográficas y Elementos Rotacionales de Planetas y Satélites, estableció en 1979 los polos y las coordenadas geográficas de Plutón. En ese momento, Plutón era considerado un planeta, por lo que su polo norte se definió en la misma dirección que el de la Tierra, en el lado norte del Plano invariable del Sistema Solar, lo que resultaba en una rotación retrógrada.
El meridiano cero se ubicó arbitrariamente en la época B1950.0. La única actualización a esta definición tuvo lugar en 1991, cuando se definió el meridiano cero como aquel ubicado en el eje Plutón-Caronte y en la cara opuesta al satélite.
Sin embargo, en la literatura sobre Plutón, estas definiciones fueron ignoradas y se utilizó la dirección del polo alineada con el vector de momento angular siguiendo la regla de la mano derecha. En otras palabras, se definió como norte la dirección opuesta a la definida por la IAU, lo que resultaba en una rotación directa del planeta.
Además, en lugar de utilizar la longitud geográfica, se emplearon diversas definiciones de fases de rotación calculadas desde una determinada época en fecha juliana, y se referían a eventos como máximos y mínimos de curvas de luz o posiciones relativas de Caronte con respecto a Plutón. La dificultad de estas definiciones radica en que los datos de diferentes artículos no pueden compararse si no están referidos a las mismas épocas y a los mismos eventos.
Cuando fue necesario definir una longitud, esta se definió como planetocéntrica, aumentando hacia el este desde el meridiano cero, en lugar de ser planetográfica, que aumenta en sentido contrario a la rotación, como recomienda la IAU. A partir del año 2000, con el aumento en el uso de programas informáticos para el cálculo de efemérides, que devuelven cálculos en las coordenadas oficiales de la IAU, estas comenzaron a ser más utilizadas y ambos sistemas coexistieron en los estudios sobre Plutón.
En 2006, con la reclasificación de Plutón como planeta enano, la definición de la IAU aplicada a Plutón se basa en la de Cuerpos Menores. Esta define el polo positivo como alineado con el vector de momento angular de Plutón siguiendo la regla de la mano derecha y utiliza una definición de longitud planetocéntrica. Por conveniencia, el polo positivo todavía se denomina polo norte.