¿Qué es la Robótica?, concepto y definición

La disciplina de la robótica se erige como una convergencia de diversos campos de la ingeniería, como la ingeniería eléctrica, electrónica, mecánica y mecatrónica, además de las ciencias de la computación. Es común que se considere a la robótica como una derivación o una rama de todas estas disciplinas, debido a que representa la fusión ideal entre ellas, permitiendo la creación y desarrollo de robots cada vez más avanzados y sofisticados.

Introducción

La robótica, además de fusionar múltiples campos de la ingeniería, se enriquece con la aplicación de otras disciplinas igualmente relevantes en su desarrollo y evolución. Entre ellas destacan la física, las matemáticas y la inteligencia artificial, que permiten a los expertos en robótica concebir y diseñar robots más complejos, precisos y eficientes en sus funciones. Por otro lado, es importante mencionar que la palabra robótica proviene del término checo robota, que se traduce como servidumbre o trabajo forzado, lo que subraya la intención original de esta disciplina de crear máquinas que puedan realizar tareas y funciones específicas sin la intervención directa de un ser humano.

La robótica, desde la perspectiva de algunos expertos, tiene un vínculo inherente con la creación de "artefactos" que buscan encarnar el anhelo humano de dotar a las máquinas de características similares a las propias, pero que, a su vez, sean capaces de liberar a la humanidad de trabajos tediosos o repetitivos que no resultan satisfactorios. De igual forma, se busca que estas máquinas incorporaren nuevas formas de trabajo que contribuyan de manera significativa al desarrollo de la sociedad, lo que implica una transformación profunda en la manera en que se organizan los procesos productivos y se generan riquezas. En este sentido, la robótica representa una oportunidad de optimizar los recursos disponibles y de crear nuevas formas de interacción entre humanos y máquinas en beneficio del bienestar colectivo.

En la actualidad, se estima que estamos inmersos en la cuarta generación de la robótica, aunque hay expertos que argumentan que estamos a las puertas de una quinta generación de esta disciplina que promete innovaciones y avances disruptivos en su desarrollo. Ahora bien, si analizamos la robótica desde el punto de vista de su estructura, podemos distinguir cinco tipos principales de robots: los poliarticulados, que se caracterizan por contar con múltiples articulaciones que les permiten realizar movimientos complejos; los móviles, que son capaces de desplazarse por diferentes terrenos gracias a ruedas, patas u otro tipo de elementos de movilidad; los androides, que se asemejan en gran medida a los seres humanos tanto en su aspecto físico como en su capacidad cognitiva; los zoomórficos, que imitan el comportamiento y apariencia de animales y, por último, los híbridos, que combinan elementos de diferentes tipos de robots para lograr objetivos específicos.

En la actualidad, un grupo selecto de países encabezados por Estados Unidos, China y la India lideran una revolución en el campo de la inteligencia artificial que promete transformar por completo el panorama tecnológico a nivel global. En este sentido, los gigantes de Silicon Valley, como Facebook, Amazon, Google y Tesla, se encuentran a la vanguardia de este movimiento, destinando miles de millones de dólares para aprovechar el poder de las computadoras y así poder sustituir progresivamente múltiples tareas que hasta ahora eran ejecutadas por seres humanos. Esta tendencia está generando un gran impacto tanto en la economía como en la sociedad, ya que se vislumbra un futuro en el que las máquinas tendrán un papel cada vez más preponderante en la toma de decisiones y en la resolución de problemas complejos en diferentes ámbitos, lo que implica un reto importante para la educación y la capacitación de las personas que serán parte de esta nueva era de la inteligencia artificial.

La robótica, como ciencia y disciplina, se fundamenta en una amplia gama de disciplinas y áreas de conocimiento, tales como la electricidad, la electrónica, la física, las matemáticas y las ciencias de la computación, que convergen para estudiar el diseño y la construcción de máquinas y dispositivos capaces de desempeñar tareas que antes eran ejecutadas por seres humanos, o que requieren de una cierta dosis de inteligencia y habilidades especiales. Es decir, la robótica puede ser definida como el conjunto de conocimientos teóricos y prácticos que permiten crear, desarrollar y automatizar sistemas basados en estructuras mecánicas poliarticuladas, las cuales están dotadas de un determinado grado de "inteligencia" y son destinadas tanto al apoyo en la producción industrial como a la sustitución del hombre en diversas tareas, o simplemente a ayudar al desarrollo y progreso de la sociedad en diferentes áreas de la vida cotidiana. La robótica es, sin duda, una de las disciplinas tecnológicas más relevantes e innovadoras del siglo XXI, y su avance ha transformado profundamente el mundo que conocemos.

Resulta interesante destacar que el término "robot" fue acuñado en 1923 por el escritor checo Karel Čapek, en su obra teatral "Rossum's Universal Robots / R.U.R.". Desde entonces, la robótica ha sido un tema recurrente en la ciencia ficción, donde se han imaginado diversos escenarios en los que los robots conviven con la sociedad, desde su papel como ayudantes y asistentes, hasta su utilización como herramientas de control y opresión. Sin embargo, en la actualidad, existe un creciente debate en torno a la incorporación de los robots y la inteligencia artificial en el mundo laboral y social, y muchos expertos han expresado su preocupación ante la posibilidad de que la automatización y la robótica generen un aumento del desempleo y la desigualdad, además de potenciales riesgos éticos y de seguridad. Por tanto, se considera que sería imprudente e irresponsable apostar de manera exclusiva por un futuro basado en la robótica, sin considerar todas las posibles implicaciones y consecuencias que esto podría conllevar.

Es importante reconocer que la robótica ha supuesto un gran avance para la humanidad, permitiendo el desarrollo de una amplia gama de disciplinas, entre ellas la cirugía robótica. En este ámbito, se busca mejorar la salud y bienestar del ser humano a través de intervenciones quirúrgicas de alta complejidad, que requieren una precisión y exactitud excepcionales. La cirugía robótica es una técnica avanzada que combina la experiencia médica con la tecnología robótica, lo que permite a los cirujanos realizar procedimientos más seguros y efectivos, reduciendo los riesgos y las complicaciones postoperatorias. Además, gracias a la robótica, se pueden desarrollar procedimientos quirúrgicos menos invasivos, que permiten una recuperación más rápida y un menor dolor para el paciente. En consecuencia, se puede afirmar que la robótica ha tenido un impacto positivo en la salud y calidad de vida de las personas, lo que demuestra que la tecnología puede ser utilizada para el bienestar humano de manera efectiva y beneficiosa.

Además de las aplicaciones de la robótica en la medicina y la industria, existen una variedad de otros ámbitos donde los robots han encontrado su utilidad, como sería el caso de la asistencia a personas con discapacidades, como brazos robóticos que ayudan a las personas con limitaciones físicas a realizar tareas cotidianas, como tomar un objeto, también la inteligencia artificial ha permitido la creación de sistemas de traducción de idiomas en tiempo real, facilitando la comunicación en contextos internacionales, y en la televisión y el cine, los robots han sido utilizados como personajes principales en películas y series. En la actualidad, un programa de televisión llamado "Los robots de combate" está ganando popularidad, mostrando batallas entre robots en un ambiente competitivo. Por último, no podemos olvidar el papel que los robots han tenido en la exploración espacial, en particular en la misión a Marte, donde los robots han sido fundamentales en la recopilación de datos y muestras del planeta rojo.

Leyes de la Robótica antigua y moderna 

Isaac Asimov, considerado como uno de los pioneros en la ciencia ficción, ha sido una figura de gran influencia en el mundo de la robótica. Con un gran número de obras dedicadas a este tema, Asimov ha plasmado su visión acerca de cómo los robots pueden convivir y servir al ser humano en distintos aspectos, lo que ha influido en el pensamiento y desarrollo de la robótica moderna. Cabe destacar que, a la edad de 22 años, publicó su cuarto relato corto sobre robots y es autor de obras de gran renombre como la serie de novelas Los Robots o la saga de la Fundación. Además, su legado en la robótica se ve reflejado en las Tres Leyes de la Robótica que propuso en sus obras de ficción, las cuales se han convertido en un referente en la creación de robots éticos y seguros para la convivencia con el ser humano, y que sin duda serían cruciales si alguna vez se llega a la construcción de robots en la vida real.

• Ningún robot puede hacer daño a un ser humano, o permitir que se le haga daño por no actuar.

• Un robot debe obedecer las órdenes dadas por un ser humano, excepto si estas órdenes entran en conflicto con la primera ley.

• Un robot debe proteger su propia existencia en la medida en que está protección no sea incompatible con las leyes anteriores.  

Es un hecho que las Tres Leyes de la Robótica, propuestas por el escritor de ciencia ficción Isaac Asimov, han sido objeto de cuestionamiento por muchos expertos y críticos, pues se ha debatido si en la actualidad son viables o no. A pesar de esto, se han propuesto nuevas reglas que incorporan puntos de vista morales y éticos, en las cuales se busca establecer un equilibrio entre el uso de la tecnología robótica y la preservación de la seguridad y el bienestar de la humanidad. Estas nuevas reglas también incluyen la consideración de la responsabilidad y la rendición de cuentas de aquellos que están a cargo del diseño, desarrollo y despliegue de robots, especialmente en aquellos casos en los que estos pueden suponer una amenaza para la sociedad.

• Los robots no deben ser diseñados exclusivamente o principalmente para matar o dañar humanos.

• Los seres humanos son los responsables, no los robots. Ellos son herramientas diseñadas para cumplir con los objetivos de los humanos.

• Los robots deben ser diseñados de tal forma que aseguren su protección y seguridad.

• Los robots son objetos, no deben ser diseñados para evocar una respuesta emocional. Siempre debe ser posible diferenciar a un robot de un ser humano. 

• Debe ser siempre posible averiguar quién es el responsable y dueño legal del robot.